sábado, 26 de septiembre de 2009



De copiosas hileras de palabras,
(legión dispuesta a domar el hecho)
ni una sola pudo acoplarse al ritmo
de tan visceral galope.

¿Qué de mí en la libertad que habita
del otro lado del borde de los nombres?

2 comentarios:

Hora Ferreyra dijo...

If this is what you're offering I'll take the rain...

No, ese es mi grito R.E.M.

No entiendo la poesía, pero me gusta lo que hiciste. Me enreda la mente, me da un calambre cerebral, lo leo al derecho, al revés (y parece árabe, probá), pero está muy bien.

Muy lindo.

Lucía Peretti dijo...

Jajaja! se ve que la sensación que te genera es bastante específica: nuevamente lo del calambre cerebral (me resulta muy acabada la expresión). Adeudo pasear por tu blog.. enseguida!
Saludos!

todo lo que puedo ver todo lo que puedo ver es un territorio plagado de objetos, hilos, colores y figuras extrañas moviéndose, acercándose...